Investigaciones sobre los manatíes

Todavía quedan muchas preguntas sin respuesta acerca del manatí, a pesar de todas las investigaciones que se han hecho sobre ellos. Por ejemplo, no se sabe por qué algunas madres abandonan a su cría cuando lo normal es que desarrollen un instinto maternal increíble y hagan todo lo posible para cuidar a sus crías.

Asimismo, no se entiende cómo son capaces de hacer la variedad de sonidos que hacen durante la comunicación con otros manatíes. Hay quienes piensan que solo se debe a la presencia de una laringe, pero esto es solo una suposición pues esta es un área de estudio compleja y no se quiere poner en riesgo la salud de ningún manatí tratando de investigar tales incógnitas.

Tal vez la pregunta más importante que aún permanece en lo que respecta al manatí, es cuántos de ellos quedan en el mundo? Realmente el número es lo suficientemente bajo como para considerarlos en peligro de extinción. Conseguir un número exacto de ellos resulta muy difícil debido a la frecuencia con la que se mueven y a la diversidad de hábitat que tienen.

El hecho de que su hábitat natural es compartido con los seres humanos, es un problema serio, fundamentalmente en aquellas zonas donde se practica la pesca o se tienen muchos barcos. Se han realizado varios proyectos con la esperanza de proteger ciertas áreas de la ocurrencia de tantos accidentes. Por ejemplo, en el área de la Florida sólo aquellos que tienen su propiedad frente a la playa, pueden tener sus embarcaciones en las costas, todos los demás deben tener sus barcos fuera de esas áreas.

Hasta el momento se sabe que hay manatíes que pueden vivir en agua salada o agua dulce, que la temperatura del agua tiene que ser de al menos 60 grados Fahrenheit para que puedan sobrevivir, que son  criaturas increíblemente suaves por lo que se puede tener interacción cercana y personal con ellos, se pueden reproducir en cualquier momento del año, no hay una estación de apareamiento fija las hembras tienen una cría cada 2 a 5 años, y muy pocas veces paren gemelos en una misma vez, pueden vivir hasta un máximo de 60 años de edad en la naturaleza con las condiciones adecuadas, en cautiverio pueden vivir hasta 50 años de edad. Una de las razones principales por las que no viven tanto tiempo en cautiverio, es debido a que muchos de ellos están enfermos o heridos cuando son capturados.

Las primeras investigaciones indicaron que los manatíes vivían en grupos pequeños, sin embargo eso fue cambiado más tarde a ser animales solitarios. A excepción de las madres y sus crías o durante el apareamiento, la mayoría de ellos andan por su cuenta. Otro momento durante el cual se agrupan muchos manatíes es cuando migran hacia zonas más cálidas huyendo de las bajas temperaturas invernales.

En comparación con muchos otros animales en el mundo, el manatí vive de un modo muy básico y aburrido. Puede pasar hasta 8 horas al día comiendo y luego hasta 12 durmiendo. Las pocas horas que quedan del día las pasan jugando, comunicándose o trasladándose hacia otros sitios.

Tal vez lo más sorprendente sobre el manatí es el hecho de que pueden viajar distancias tan grandes durante el período de migración, cuando van en busca de aguas tropicales. Las investigaciones muestran que no existe un orden social entre los manatíes y que son capaces de migrar sin ningún tipo de tensión.